- Versión 1
- Descargar 504
- Tamaño del archivo 446.27 KB
- Fecha de creación 6 diciembre, 2019
-
Términos y Condiciones1- Todos los documentos en PDF se proveen de buena fe y siempre respetando los derechos reservados de autor. 2- Algunos documentos tienen derechos de autor pero se han conseguido los permisos correspondientes (ejemplo: Chapel Library) 3- El hermano Allan Román (ahora en la gloria del Señor) me autorizó para publicar todas sus traducciones. 4- Usted se compromete a no vender, a comerciar o a lucrarse de cualquier manera de estos archivos. 5- Usted se compromete a dejarnos saber con la mayor brevedad cualquier problema de derechos de autor en relación al producto descargado.
Tengo algo que decirle
por J. C. Ryle (1816-1900)
Primer sermón predicado por J. C. Ryle en la iglesia de Santa María de Helmingham, Suffolk, Inglaterra - 1844
Y publicado como un capítulo de la tercera edición de libro "Home Tracts"
Entonces respondiendo Jesús, le dijo: Simón, una cosa tengo que decirte… ~Lucas 7:40
No sé quién es usted; no sé ni siquiera si usted es anciano o joven, rico o pobre, letrado o iletrado; solo sé que usted es un hijo de Adán y posee un alma que se perderá o salvará, y entonces le digo: “¡Escúcheme! ¡Tengo algo que decirle!”. Lector, tengo cuatro cosas para decirle, y en breve serán dichas. El Señor preparó Sus palabras en el tiempo acertado para su alma.
I. Primeramente, tengo una PALABRA DE SUEÑOS Y DESEOS para cada uno de aquellos en cuyas manos vengan a caer estas páginas. Digo que es el deseo de mi corazón y mi oración a Dios que usted pueda ser salvo. Quiero que usted se convenza de su pecaminosidad ante los ojos de Dios, para que sienta su necesidad de un Salvador; que conozca a Cristo por la fe y tenga vida eterna en Él.
Deseo que usted sea uno de los que conoce su condición de perdido por naturaleza, su propia corrupción, culpa, y riesgo de ruina eterna; su necesidad de una justicia mucho mayor que la suya con la que se presente delante de Dios en el Día del Juicio.
Deseo que usted sea uno que se esfuerce en Cristo para la paz, y lance la carga de su alma sobre Él; que crea en Él para el perdón, que confíe en Él para la liberación de toda transgresión y abandone todas las otras esperanzas y confianzas, extrayendo de Él todo su confort y fuerzas.
Deseo que usted sea alguien que viva por fe, se sostenga por fe, camine en fe; que reciba con el corazón esta grande verdad: “aquel que cree en Jesús no es condenado”, y que descanse seguro en ella.
Deja tu comentario