El propósito de esta nueva serie de sermones es mostrar la centralidad del acto de congregarnos y escudriñar aquellas actividades que Dios estableció como modelo vinculante para la las iglesias del Nuevo Testamento.
Para tales propósitos, nuestra argumentación comenzará con el aporte de las pruebas bíblicas que nos enseñan y confirman la centralidad y el carácter crucial de congregarnos, y basados en esa realidad, procederemos a contemplar cada una de las razones por las que nos congregamos: oración, adoración, evangelismo, etc.
Lo anterior puede parecer muy básico u obvio para los creyentes sazonados o experimentados, pero consideramos que esta serie podría, de hecho, ser de gran ayuda para hermanos que vienen de iglesias en las que sólo asisten a un culto público por semana, y que poco o nada conocen aquellas cosas que como iglesia deberían hacer cuando se congregan.
Confiamos en el Señor que así sea y le animamos a seguir esta sencilla serie.